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¿Cómo se fabrican las barricas de vino?

#1 Selección de la madera para las barricas:

Antes de comenzar el proceso debemos seleccionar la mejor madera según determinadas características como su permeabilidad, su densidad, su baja porosidad, su tamaño del anillo adecuado, su alta resistencia mecánica y su alta durabilidad. Los primeros toneles se fabricaron de la madera más abundante en el lugar de producción, utilizaban la madera de castaño, pino, cerezo, roble… Sin embargo, actualmente todas las barricas se fabrican casi exclusivamente de madera de roble americano o francés.

#2 Secado de barricas:

Posteriormente se deja secar la madera, por una parte, para conseguir eliminar el agua sobrante, para asegurarnos de la estabilidad y firmeza de la madera. Y por la otra parte, conseguir reducir al máximo el contenido en taninos elágicos, éstos son los que aportan un color verdoso al vino.

Fases de secado:

Existen dos tipos de secado, el natural y el secado artificial. En el natural se necesita secar la madera a la intemperie para eliminar los taninos. Favoreciendo su secado a una temperatura media de 15º-20ºC, con variaciones de 12º-15ºC, en lugares con lluvias regulares y altas cercanas a los 1000 mm anuales. Generalmente estas condiciones se dan en sitios cercanos al mar, pero esto no elimina en su totalidad el agua. Y el secado artificial elimina el agua sobrante a través de estufas, pero no se consiguen eliminar los taninos.

Por ello, generalmente se utiliza una combinación del secado natural y artificial. Una vez fabricadas deben llenarse de vino para evitar que se modifique su humedad y se produzcan fugas.

la doma
#3 Selección y montaje de duelas:

Las duelas son las piezas en las que se corta la madera, generalmente tienen un espesor entre 22 y 30 mm. Todas las duelas deben ser cortadas con la misma longitud para después eliminar la madera del interior de manera que forme una especie de canalón. Por último, se unirán con aros de mimbre o de madera.

Las duelas se colocan verticalmente y son ordenadas de costado en el interior de un aro metálico denominado molde. Seguidamente se coloca el aro en la parte superior y después se montan las duelas, para conseguir su curvado se aplicará calor desde el interior de la campana. Una vez doblada la madera se sigue calentando la barrica durante cierto tiempo para asegurar su forma cilíndrica.

#4 Tostado de las barricas:

La última fase es el tostado, tiene como objetivo la formación de sustancias que confiere al vino olores y sabores que complementen a los de la madera seca. En este último proceso, se producen modificaciones físicas y químicas en la madera según las necesidades de la bodega. Generalmente se fabrican barricas con tostado ligero, medio e intenso para mejorar la calidad y el sabor de nuestro vino.

Esta barrica terminada pasa entonces al control de calidad, donde se inspecciona cuidadosamente por dentro y por fuera y se somete pruebas de estanqueidad, reparando posibles puntos de fuga. Una vez dado el visto bueno,  el tonelero la marca con su firma con láser o fuego, indicando también el tipo de tostado, el origen de la madera así como el código de trazabilidad de la misma. ¡Todo un arte digno de contemplar!